Para tener en cuenta… Esta información debe utilizarse con fines educativos. No debe interpretarse como consejos médicos o un diagnóstico, condición o enfermedad.

Los perros pueden ser grandes amigos para los humanos, ya que se sabe que ofrecen amor incondicional, felicidad, alegría, fidelidad y compañía.  Tener perros como mascotas también ha demostrado tener varios beneficios para la salud en los propietarios. Por ejemplo, mayor ejercicio al salir a pasear a su mascota, mejor calidad de vida. También están los perros que pueden ayudar a las personas con diabetes tipo 1, a manejar sus condiciones con mayor confianza y con una perspectiva nueva y positiva.

En que se utiliza el olfato del perro

Los perros no sólo son grandes compañeros para la vida, hoy en día, los perros están en todos los campos, en la seguridad, en la medicina y en la salud mental; científicos han encontrado maneras en que estos animales pueden apoyar a distintas labores humanas. Por ejemplo, los perros que huelen drogas ilegales en el aeropuerto, los guías que ayudan a personas que sufren ceguera e incluso con el don de ser animales de apoyo para aquellos que sufren de estrés postraumático. Incluso han probado detectar el cáncer en los humanos.

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Detectan la hipoglucemia e hiperglucemia

Un estudio reciente ha demostrado que también podrían ser un gran apoyo para las personas que sufren diabetes tipo 1, ya que podrían alertarlos sobre episodios de hipoglucemia. La hipoglucemia es un riesgo para las personas que padecen esta enfermedad, ya que los niveles de azúcar en la sangre son peligrosamente bajos. Un episodio de hipoglucemia es cuando el nivel de azúcar en la sangre desciende peligrosamente y, si no se trata, puede provocar la pérdida del conocimiento o incluso la muerte.

Las personas que sufren diabetes necesitan tomar insulina para bajar sus niveles de azúcar en la sangre, sin embargo, este tratamiento podría provocar episodios de hipoglucemia. Al padecerlos podrían provocar desmayos e incluso convulsiones si no se tratan a tiempo.

Entrenamiento para los canes

Con el debido entrenamiento, este olfato hiperdesarrollado se traduce en una figura nueva, la de perro de terapia o los perros de alerta médica.

Un perro de alerta médica es cuidadosamente seleccionado, educado y adiestrado para detectar la hipoglucemia e hiperglucemia (diabetes) y/o las crisis de desconexión sensorial (epilepsia). Ver cómo actúa su compañero canino cuando olfatea la hormona que indica que puede sufrir una crisis es la alerta para saber que se debe actuar. Gracias a esto, las personas acompañadas por este perro saben lo que les va a pasar, al igual que familiares, disponiendo del tiempo necesario para minimizar las consecuencias de estos episodios y mejorando potencialmente su calidad de vida.

Algunos profesionales entrenan a los perros para que respondan al olor de las enfermedades humanas y ayudan a los propietarios a vivir con enfermedades que amenazan la vida.

 

Como funciona

Familiarizados con sus dueños, los perros están condicionados a responder con comportamientos de alerta cuando los niveles de azúcar en la sangre de sus dueños están fuera del rango objetivo. Los perros de detección médica ayudan a los diabéticos a regular la insulina.

Alertados por el comportamiento de alerta de su perro mascota, si ocurren episodios fuera del rango, el paciente puede tomar las medidas adecuadas, generalmente suministrarse insulina o comer algo para mantener los niveles de glucosa correctos.

Conclusiones de algunos estudios

Un estudio realizado por la Universidad de Portland (EEUU) en el 2017 realizó un seguimiento de la detección de hipoglucemia en personas con Diabetes Tipo I por parte de los canes. Los resultados arrojaron una conclusión: los perros detectaban bien la hipoglucemia, aunque también se registró una tasa elevada de falsos positivos. Por este motivo, se recomienda utilizar estos perros como complemento a otros sistemas detectores y no como único método de control.

Deben ser entrenados por profesionales

Una vez seleccionados, son formados durante cuatro meses que dura su adiestramiento. Durante este periodo, el cachorro vive con una familia de tutela. Esta figura es muy importante porque se encarga de su socialización.

El perro deberá pasar por distintas fases. La primera se realiza en el laboratorio. Allí conoce el olor que debe detectar y cómo debe marcarlo cuándo lo esté percibiendo. En la segunda fase se simulan situaciones reales, por ejemplo, en un dormitorio o en una cafetería para que el animal aprenda a hacerlo en el mismo momento en el que detecta ese olor, con antelación a que se produzca una hipoglucemia o hiperglucemia en el caso de la diabetes o una crisis de epilepsia.

Una vez superadas estas dos fases, es entregado a una familia. Y se continua con un contactos periódicos con los adiestradores a modo de seguimiento. La llegada de estos perros a una familia cambia la vida. Es una gran ayuda y apoyo para niños/as y adultos que padecen de esta enfermedad.

Complemento ideal a otros sistemas de detección

Son pocos los lugares de entrenamiento para estos canes, pero si puede acceder a uno de estos compañeros de vida es algo que mejorara sustancialmente la calidad de vida. También debe tener en cuenta que a pesar que cuenta con este apoyo canino debe llevar el debido control con el medidor.

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