Las amputaciones causan gran impacto a nivel físico, emocional, familiar y social. La pérdida de una extremidad es similar al dolor provocado por la muerte de un familiar, apareciendo un proceso de duelo. Todo ello repercute en la salud psicológica, especialmente en los primeros 2 años, con un alto porcentaje de ansiedad y depresión.
Se aclara que es un proceso personal, por lo tanto, debe realizarse al ritmo de la persona amputada y con la asesoría de un profesional. En algunas ocasiones las ideas irracionales sobre la situación que vive y sobre sí …