Diabetes
Complicaciones diabetes mellitus
La diabetes mellitus es un proceso crónico que aparece cuando el páncreas no produce suficiente insulina o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que genera. El pie es una de las partes del cuerpo que puede verse más afectada por esta enfermedad, dando lugar a lo que conocemos como pie diabético.
La diabetes es una de las enfermedades de más alta prevalencia en el mundo al igual que sus complicaciones crónicas. El pie diabético es una grave complicación de la diabetes mal controlada que daña los nervios de sensibilidad y las arterias que oxigenan el pie formándose úlceras que se infectan fácilmente, no cicatrizan, se profundizan, los tejidos sufren necrosis y terminan en amputación.
Los diabéticos, como todas las personas, pueden desarrollar problemas en los pies tales como el pie diabético; sin embargo, en ellos convergen múltiples factores que hacen que incluso los problemas más simples y normales puedan empeorar y llevar a complicaciones severas.
¿Qué es el pie diabético?
El pie diabético es una alteración clínica que se produce por mantener unos niveles de glucosa más elevados de lo habitual. Se caracteriza por:
– Una disminución de la sensibilidad en el pie (neuropatía).
– Una disminución de la circulación de la sangre (isquemia).
Ambos factores pueden predisponer la aparición de una ulceración en el pie.
Las complicaciones relacionadas con el pie diabético, úlceras y amputaciones se producen generalmente como consecuencia de neuropatía diabética y anomalías anatómicas con o sin coexistencia de arteriopatía periférica.
Las úlceras del pie diabético pueden prevenirse con una adecuada estrategia que comprenda el cribado, la clasificación del riesgo y las medidas efectivas de prevención y tratamiento.
Son factores de riesgo de úlceras en el pie diabético, en orden de importancia: mal control glucémico (HbA1 > 9 %); diabetes de larga evolución (>10 años); amputación previa de la extremidad inferior; mala visión; ausencia de pulsos; úlcera previa en el pie y deformidad en los pies.
El pie diabético es un síndrome complejo. Está caracterizado por diferentes escalas de gravedad en infección, isquemia, neuropatía y edema. En el pie diabético se produce destrucción de tejidos en extensión, profundidad y áreas anatómicas que puede llevar al paciente a la amputación o a la muerte, sobre todo, si el paciente tiene comorbilidades asociadas y su estado clínico está muy afectado.
Se estima actualmente que entre un 15% y un 20% de los diabéticos presentarán una úlcera en sus pies, en el transcurso de su evolución y de ellos un 30% sufrirá una amputación.
Diagnóstico
El diagnóstico de infección es clínico y se fundamenta con la presencia de al menos dos de los siguientes signos: inflamación, induración, eritema perilesional, hiperestesia, dolor, calor local y exudado purulento.
¿Cuándo se presenta?
El síndrome de pie diabético no se presenta a una edad específica; sin embargo, se suele ver con mayor frecuencia, mayor severidad y a más temprana edad en los individuos con controles de su nivel glicémico más deficientes, mayor tiempo de evolución de la enfermedad y comorbilidades asociadas.
Tipo de neuropatía
Los pacientes diabéticos con frecuencia desarrollan problemas en los pies: generalmente secundarios a sus efectos fisiopatológicos a nivel, de los nervios neuropatía, que resulta en alteración de la sensibilidad y movilidad a nivel de, pies y dificultad para la deambulación.
Neuropatía motora
Manifestada por dolor y alteraciones de la movilidad.
Neuropatía sensitiva
Alteración de la sensibilidad al frío, al calor y/o al dolor. El paciente podría andar días con una piedra en el zapato sin notarlo; o es posible que no sienta una lesión en los pies, hasta que tenga una lesión e infección de la piel.
Neuropatía neurovegetativa
La piel de los pies suele secarse mucho; es posible que se pele o agriete. El problema es que los nervios que controlan la grasa y humedad se encuentran alterados.
La neuropatía, en asociación con la insuficiencia vascular y/o enfermedad arterial periférica (mala circulación) y cambios en la forma de los pies o dedos, propician un ambiente ideal para lesiones de piel y partes blandas, progresivamente profundas y crónicas en los pies; que secundariamente se infectan, pudiendo evolucionar hasta llegar a la osteomielitis (infección ósea), particularmente en individuos con factores de riesgo. El síndrome de pie diabético es causado por isquemia de piel, partes blandas y hueso en miembros inferiores.
Epidemiología
La incidencia de infección del pie en diabéticos es de 30 a 40 casos/1000 personas con diabetes, por año. Se sabe que 60% a 80% de las personas con infección de pie diabético tiene osteomielitis confirmada; la osteomielitis dentro de este cuadro agrava el riesgo de amputación.
Factores desencadenantes o riesgo de infección para el pie diabético
- El tiempo de diabetes, más de 10 años.
- Hiperglucemia no controlada.
- Discapacidades como disminución de la visión.
- Neuropatía motora, sensitiva y autónoma periférica: El control metabólico. La presencia de neuropatía diabética.
Insuficiencia arterial: La presencia de enfermedad arterial periférica. - Deformidades neuroosteoartropáticas: La presencia de deformidades o alteraciones en la biomecánica del pie (PIE DE CHARCOT, Hallux, dedos en garra etc.).
- La presencia de infecciones.
- Úlceras y amputaciones previas.
- Conducta de inadaptación: Estilo de vida (sedentarismo, cigarrillo, alcohol, abandono, comorbilidades no controladas, factores nutricionales.