Neil nació con una dificultad visual que le hace ver en escala de grises, los colores eran algo inexistente para él. Pero la tecnología le tenía una solución. A sus 19 años, luego de convertirse en músico en España, viajó a Irlanda donde conoció al experto en tecnología digital Adam Montandon. Juntos crearon una antena que permite convertir las ondas de color en sonido. De esta forma, mediante un sensor, la antena lee los colores y los transforma en un sonido particular.
El invento ganó varios premios en 2004, pero nadie se imaginaba lo que vendría después. En un acto clandestino, y contra la recomendación de los comités de bioética, un grupo secreto de médicos le implantó la antena en el cráneo a Neil, desde su hueso occipital. A partir de este momento, en 2004 Neil Harbisson se convirtió en el primer ser humano cyborg. El gobierno inglés lo reconoció, cuando dejó renovar su pasaporte, con una foto de la antena integrada.
La antena de Neil le permite ampliar sus sentidos, tiene conexión a internet con la que puede recibir colores de satélites y de cámaras externas, así como también recibir llamadas telefónicas directamente a su cráneo.
Neil Harbisson tiene una antena en su cráneo
Neil Harbisson tiene una antena en su cráneo * MG Latam