Actualmente existe una conciencia sobre el daño y crueldad que significa cualquier tipo de amputación innecesaria en los animales, lo cual ha llevado a que algunos veterinarios se nieguen rotundamente a realizar este tipo de procedimientos. Las siguientes son algunas de las razones por las cuales se debe cuestionar antes de solicitar este tipo de cirugías:
No son cortes sino amputaciones:
En la amputación de la cola, las orejas, espolones, uñas totales, se cortan cartílagos, nervios, vasos sanguíneos y otros tejidos además de la piel. Y estas son partes importantes para el equilibrio, orientación y la defensa.
La cola es la continuación de la columna:
Está compuesta por unas vertebras llamadas caudales acompañadas de otros tejidos; siendo un elemento importante para mantener el equilibrio del perro. Al correr, girar y hacer ciertos movimientos el animal necesita de la cola. Es como si fuera su timón.
La cola y las orejas son vitales para la comunicación del perro:
Además de la comunicación oral (ladridos, gruñidos, gemidos, etc), el perro envía mensajes a otros perros a nivel físico y humoral (olores). La posición de las orejas y el movimiento de la cola transmiten información importante para la socialización con otros animales.
No tiene fines médicos que lo sustenten, solo estéticos:
A no ser por casos específicos en donde la salud de la mascota se vea afectada como una fractura de cola o la extirpación de un tumor en esas zonas o por lesiones que no puedan permitir la reconstrucción de estas zonas, estas amputaciones están prohibidas en muchos países del mundo.
Es sumamente doloroso y traumático para el animal:
Pese a que la amputación de cualquier parte se debería realizar durante los cinco primeros días de nacidos, debido a que los nervios y tejidos son menos susceptibles; el dolor existe. Los veterinarios que aceptan hacerlo aplican una anestesia local, pero se conoce que los criadores no la utilizan, y someten a la cría a un dolor y trauma innecesario. Es un procedimiento caracterizado por un abundante sangrado y un post operatorio muy incómodo para la mascota.